Los veranos cada vez más intensos en todo el mundo han hecho casi inimaginable la vida en las grandes ciudades sin aire acondicionado. Si uno vive o trabaja en un edificio de hormigón y fuera la temperatura supera los 35 grados, parece no haber alternativa a un sistema de enfriamiento, que, paradójicamente, agrava el problema del que se intenta escapar. Debido a esto, la arquitecta y diseñadora Doris Sung (Hollywood, California, 60 años) cree que la forma de construir debe atravesar un cambio radical y tener en cuenta las condiciones climáticas, la eficiencia energética y el bien común dentro y fuera de las edificaciones.