La Audiencia Nacional ha condenado a 10 meses de cárcel al exembajador de España en Venezuela Raúl Morodo y a dos años a su hijo, Alejo, después de que estos llegasen a un acuerdo con la Fiscalía. El exdiplomático reconoció que participó en una trama societaria para no declarar a Hacienda los beneficios que su hijo Alejo obtuvo por prestar “servicios de asesoramiento legal y consultoría internacional” a, entre otros, la empresa pública venezolana Petróleos de Venezuela (PDVSA). Alejo Morodo, que también confesó tras sumarse al acuerdo con el ministerio público, desarrolló estos trabajos después de que su padre dejara el cargo en el país americano, que ejerció con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.