El exministro José Luis Ábalos y quien fuera su asesor, Koldo García, han sorteado esta semana la prisión preventiva tras comparecer ante el magistrado del Tribunal Supremo Leopoldo Puente. Pese a que el juez advierte de que el último informe de la Guardia Civil “profundiza” en los indicios de que ambos recibieron ingresos “irregulares y opacos” a cambio, supuestamente, del amaño de contratos públicos, ni el instructor ni el fiscal jefe de Anticorrupción han considerado justificado su encarcelamiento. Esta situación contrasta con la del ex secretario de Organización del PSOE Santos Cerdán, a quien el mismo juez, con el apoyo del mismo fiscal, mantienen en prisión desde el pasado 30 de junio por su participación en la misma red corrupta que Ábalos y su antiguo asesor. ¿Cómo se explica esta diferencia? Los auto dictados por Puente recogen sus argumentos, aunque pueden no disipar del todo las dudas, ante lo que fuentes jurídicas aseguran: el juez y el fiscal tienen información de la Guardia Civil que les lleva a concluir que Cerdán no debe estar en libertad. Para la defensa, sin embargo, esta diferencia “no tiene sentido”.
