Donald Trump se estrenó este lunes como presidente con una montaña de órdenes ejecutivas. Las primeras las firmó jaleado por la multitud en un estadio con unas 15.000 personas. Las siguientes fueron en el Despacho Oval de la Casa Blanca, mientras contestaba de forma informal preguntas de los periodistas. Uno de los presentes le preguntó por el bajo gasto en defensa de países de la OTAN como Francia y España, pero Trump singularizó a España diciendo que su gasto es “muy bajo” y agitando el fantasma de “aranceles del 100%”, pero encuadrando a España entre los BRICS, quizá confundido por la S de Sudáfrica.